Gracias a Dios existe el streaming

Tan devaluados están los libros que una empresa que los vende usados y tenía stock en un depósito, al término del contrato de alquiler decidió dejarlos y dar aviso a los vecinos, para que se los lleven gratis y les ahorren el gasto del traslado (a la basura). El convite fue un exitazo y los ávidos “lectores” dejaron el galpón pelado.

Una forma optimista de leer la noticia es que la gente ávida de lectura se apersono en el lugar para hacerse con algunos libros que pudieran sacarlos de la ignorancia, y llevarlos a un estadio superior de existencia, donde la sabiduría juegue un rol fundamental para alcanzar un grado de felicidad sólido y estable, vamos, una especie de nirvana occidental a través de las letras.

Pero al revisar las fotos de la escena del crimen constaté que  la turba de intelectuales reunidos, se dedicaron a dar  pena acarreando libros a paladas como si fueran bolsas de papas forrajeras. En realidad eso era lo que estaban llevando, o papel para empezar un fueguito, envolver alguna compra delicada o poner en el piso mojado. Acumulaban, juntaban, no importaba para que: “son gratis y me los llevo a casa, después veo que hago”.

Se parecían en su afán de acopiar a mi querida mascota de la infancia, Carlitos, un hámster que como todos, cada vez que le limpiaban la jaula, no reconocía el lugar en donde vivía, y se llenaba los cachetes de comida temiendo el desalojo. El exilio terminaba al rato cuando, luego de alguna meadita, ese espacio se transformaba nuevamente en el hogar dulce hogar.

Es que la naturaleza humana nos lleva a acumular a tontas y a locas. Posesos por un no diagnosticado síndrome de Diógenes, guardamos discos, películas y libros que nos hemos pirateado con uno de esos programas P2P, y que luego en la puta vida usaremos. Solo nos servirán para alardear con los amigos: “¡No sabes, tengo 1.327 películas bajadas y no he visto una!”.

A todos ellos va dedicado este post, para comunicarles que ya funciona el streaming… gracias a Dios, porque ya no me quedan más discos…

Links:

Spotify

Last fm

Divx Online

Peliculas yonkis

Gratis pero rayado

Mediante un click en el disco acceden, con Spotify instalado, a escuchar un disco rayado de Marvin Gaye

Spotify es un servicio que ofrece música en streaming, online, o sea que no hay que bajar ningún archivo a tu ordenador, solo el programa que funciona como reproductor. Su catalogo es amplio y de mantenerse puede servirte de discoteca el resto de tu vida. El servicio es muy bueno y estable. Está en periodo de prueba y solo se puede acceder  con la invitación de un miembro registrado… MENTIRA, si acceden mediante el siguiente link:

https://www.spotify.com/en/get-started/

A pesar de todo lo bueno, y no es que me moleste demasiado, pero ¿era necesario para ofrecer un servicio como este que muchos  de los temas estén picados, rayados y en algunos casos cortados? ¿Será una estrategia de negociación con los organismos que regulan los derechos de propiedad intelectual o simplemente un requisito de los mismos?  La verdad es que este defecto, mas una publicidad cada 10 canciones es lo único que opacan un poco el sistema.

Igualmente ya estamos acostumbrados a que la calidad de los sonidos grabados este en decadencia desde la “extinción” del vinilo, pero no puedo atribuirle la cantidad de cortes  a la mala calidad del streaming ¿o sí? Igualmente sostengo que el sonido es aceptable, la calidad del servicio es más que suficiente y  no me quitan el sueño las asperezas que se generan… Por el momento es recomendable.